Idiotas
Somos idiotas, somos idiotas hermosos. Criados bajo la misma imaginería. Escuchando los mismos discos, y hablando de las mismas películas. Somos tontos inocentes, somos golfos agresivos, somos niños sensibles, somos drogatas tímidos. No entendemos el amor y lo comemos como chicle. Nadie nos enseñó, y lloramos, y estuvimos ahí, al borde. Lo escribimos, lo compusimos, lo pintamos y lo dijimos, pero nos pasó de nuevo, y otra vez más.
Nos cansamos, después nos repusimos, y nos volvimos a cansar. Entramos y salimos, nos conocimos, nos gustamos, nos quisimos, nos peleamos, nos reconocimos.
Somos idiotas hermosos, los tres, los cuatro, los cinco, los seis acaso.
No somos el signo de los tiempos, somos raros pero la zafamos, nos buscamos como hermanos, pero nos rechazamos como idiotas que somos. Y a pesar de todo tenemos miedo a que nos rechacen. Y los vemos a los demás tan articulados, tan aceitados y decimos "yo también", y lo intentamos, y, de nuevo, la zafamos bastante bien. Pero nosotros no, no somos así en realidad. Somos idiotas. Somos idiotas hermosos.
Nos cansamos, después nos repusimos, y nos volvimos a cansar. Entramos y salimos, nos conocimos, nos gustamos, nos quisimos, nos peleamos, nos reconocimos.
Somos idiotas hermosos, los tres, los cuatro, los cinco, los seis acaso.
No somos el signo de los tiempos, somos raros pero la zafamos, nos buscamos como hermanos, pero nos rechazamos como idiotas que somos. Y a pesar de todo tenemos miedo a que nos rechacen. Y los vemos a los demás tan articulados, tan aceitados y decimos "yo también", y lo intentamos, y, de nuevo, la zafamos bastante bien. Pero nosotros no, no somos así en realidad. Somos idiotas. Somos idiotas hermosos.